Durante mucho tiempo, la gran mayoría de los países han restringido la capacidad de las personas extranjeras para residir permanentemente dentro de sus fronteras. Aparte de las iniciativas específicas para paliar la escasez en el mercado laboral, es difícil conseguir un visado de residencia permanente, sobre todo en una de las zonas geográfica más solicitada, la Unión Europea.

Esto cambió hace relativamente poco tiempo debido a dos factores muy relevantes:

1. Los gobiernos comprendieron que a medida que la población envejece, la proporción entre las personas en edad de trabajar y las mayores de 65 años caería inevitablemente por debajo de lo que se considera sostenible. Podría ayudar, pero haría saltar las alarmas entre los sectores más nacionalistas de la población la llegada de miles personas sin formación como mano de obra. Por eso tenía sentido que las naciones desarrolladas abrieran sus fronteras a los inmigrantes que pudieran mantenerse económicamente.
2. El mercado inmobiliario de la Europa periférica se vio gravemente afectado por la crisis financiera mundial del 2008. España, Irlanda, Portugal y Grecia, entre otros, se apresuraron a desarrollar visados dorados residenciales para ayudar a impulsar la recuperación del mercado, concediendo a sus titulares privilegios de residencia permanente en sus países y, en consecuencia, en la Unión Europea. El mercado inmobiliario se benefició al instante, ya que la inversión mínima requerida para dicho visado se convirtió en el precio mínimo de todas las propiedades.

Cambios en las prioridades

Tal y como la práctica budista enseña: Lo único que permanece igual es el cambio. El primer factor que impulsó el giro hacia los Golden Visa ha sido sustituido, con creces, por el segundo factor.

¿Qué está pasando? Pues, el número de países europeos que ofrecen visados dorados para la residencia permanente se está reduciendo ya en 2023.

Este movimiento creemos puede atribuirse a un factor clave de fuerza mayor: El objetivo original de los programas Golden visa para la residencia permanente se ha cumplido. Desde finales de 2008 hasta la fecha, los mercados inmobiliarios residenciales de España y países de la periferia europea han repuntado, pero en cambio muchos residentes nacionales tienen dificultades o no puede permitirse comprar o alquilar una vivienda.

Entonces, si el programa de visados dorados creado por el Gobierno español para estabilizar el mercado inmobiliario sólo conduce a más problemas, ¿para qué mantenerlo?

Ahora bien, los problemas de la demografía europea, incluido España, sin embargo, no han cambiado.

Sigue aumentando la cantidad desproporcionada de jubilados y de personas mayores que no trabajan. Por esta razón creemos que, a los gobiernos de España, Portugal, Grecia y demás, les resultará difícil recaudar suficientes impuestos para mantener a todos esos jubilados. Por lo tanto, hacer posible que las personas extranjeras residan legalmente en el país y contribuyan con sus propios salarios a la economía es una forma de cerrar la brecha de financiación.

Estas opciones están ahora mismo encima de la mesa y deberías evaluarlas o considerarlas seriamente, según tu situación.

Una nueva realidad

Dado que los visados de oro residenciales se están eliminando gradualmente en Europa, existe la creencia generalizada de que aquellos con otros tipos de residencia de larga duración tendrán dificultades para conseguir una vivienda. Lo cierto es que es todo lo contrario.

No existen restricciones a la capacidad de, por ejemplo, un titular de un visado de nómada digital, para comprar o alquilar una vivienda en España.

Los nómadas digitales compiten con los nacionales españoles en un mercado inmobiliario normalizado, y no con persona ricas que, incluso a veces ni siquiera han visitado nunca Europa, pero buscan una segunda residencia o invertir en bienes raíces. El Gobierno español observa en este escenario que todos los involucrados salen ganando.

Por otro lado, los residentes de larga duración que cumplan los criterios podrán solicitar la residencia permanente o incluso la ciudadanía cuando expire su primer permiso. Después, si aún no lo han hecho con su visado actual, podrán trabajar legalmente o establecer una empresa.

Conclusión

En nuestra opinión, como resultado de los cambios mencionados, los futuros inmigrantes de regiones como Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, India o Latino América no se beneficiarán muy poco del actual clima de visados dorados de España.

En esta nueva realidad, nuestro objetivo es proporcionarte el contexto que necesitas para navegar con éxito en este entorno.

Una de nuestras clientas de inversión nos preguntó sobre la compra de un inmueble en España para cumplir los requisitos de residencia legal vía el visado dorado. Durante un tiempo, estuvo considerando el visado dorado para ampliar su estancia en el Espacio Schengen más allá de los 90 días, que es lo permitido para pasaportes estadounidenses. Sin embargo, tenía dudas porque había leído que, incluso con un visado de oro, seguiría estando limitada a pasar sólo 90 días en cualquier periodo de 180 días en otro país Schengen.

La pregunta existencial de nuestro cliente fue: "¿Para qué me sirve un visado dorado?".

Un visado dorado, por ejemplo, en España, permite residir permanentemente en el país, que es parte del Espacio Schengen. Esto permite salir de España para pasar un periodo de 90 días en otro país Schengen y luego volver a España para iniciar un nuevo periodo de 180 días. También permite mantener la residencia, aunque la persona decida no vivir por ejemplo en España, si es éste el país que le concede dicha residencia por inversión.

Sin embargo, para nuestro cliente estos beneficios no eran tan favorables como había imaginado en un principio. Pensó, quizás como muchos otros, que pagar 500.000 euros le daría acceso sin restricciones a todo el Espacio Schengen.

La pregunta que nos formuló plantea muchas cuestiones significativas:

1. Los regímenes de visado dorado suelen estar rodeados de ideas erróneas. Muchas personas malinterpretan las ventajas de un visado dorado.
2. Los regímenes de visado dorado no son adecuados para todo el mundo. Sólo son relevantes para unas pocas personas con determinados objetivos internacionales.
3. Los regímenes de visado dorado no son el medio exclusivo de obtener la residencia en Europa. Hay otras opciones que pueden ser más directas y adecuadas, según tu situación y tus objetivos.
4. Invertir en propiedades no requiere el uso de un programa de visados dorados. Puedes comprar una casa en Europa como inversión o por tu estilo de vida sin necesidad de participar en un programa de visados dorados.

En nuestro despacho llevamos más de 35 años orientando a particulares y empresas sobre cómo vivir, jubilarse y hacer negocios en España. Dependiendo de tus objetivos, quizás sería bueno que consideres otras opciones, al margen de los ya ampliamente conocidos visados dorados. Estaremos encantados de evaluar tu caso y asesorarte sobre la mejor opción para ti y tu familia.